Arañas vasculares
Dependerá del tratamiento de cada caso.
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Vida normal tras la sesión.
Las varices son el signo externo de una deficiente circulación. Aunque se pueden prevenir teniendo una vida activa que evite la dilatación de vasos y el estancamiento del torrente sanguíneo, este problema sigue afectando a muchas personas, especialmente mujeres.
Un problema estético y de salud
Las varices se desarrollan con el calor y poco a poco pasan de ser un problema estético a una patología dolorosa. La mayoría aparecen en las piernas, donde la gravedad ejerce mayor presión sobre las válvulas, obstruyendo el retorno venoso y provocando la aparición de unas finas líneas azuladas muy visibles.
Más allá del calor existen muchos otros factores como nos predisponen a sufrir este problema de circulación: la herencia genética, los embarazos, el uso de anticonceptivos hormonales, la permanecer largos periodos de pie o sentado, la obesidad, la falta de ejercicio y la edad avanzada son algunos de los principales.
Síntomas de las varices
Los síntomas de las varices que aquejan a la mayoría de las personas son pesadez de piernas, cansancio, calambres, hormigueos, comezón, sensación de calor o quemazón, hinchazón de tobillos y pies e incluso fuertes dolores. Todas estas molestias se acentúan al final de la tarde, después de la actividad física habitual o con la posición de pie o sentado sostenida.
Existen diversos procedimientos para la eliminación de las pequeñas varículas o varicosidades:
Dependiendo del tipo de varices que sufra el paciente y de las causas que las han provocado, la Dra. Costa recomendará uno u otro tratamiento. Asimismo, todos ellos se pueden combinar entre sí para obtener unos mejores resultados a nivel estético y de salud.